Recuerda todo

Desde que se popularizó la fotografía se ha usado principalmente para dejar constancia de los acontecimientos importantes de nuestra vida. No obstante, muchos de esos acontecimientos se nos pasaban de largo por no tener a mano una cámara. El auge de las cámaras en los teléfonos móviles ha contribuido de manera notable a registrar muchos momentos menos trascendentales pero no por ello menos dignos de ser recordados. Y, aun así, se nos escapan instantes. Por eso, Memoto ha ideado la Lifeloggin Camera, precisamente para ir siempre "con la cámara a cuestas". Se trata de un aparato poco mayor que una chapa que se puede llevar colgado o en la solapa de la chaqueta. No dispone de botones pero mientras la llevemos colgada registra una fotografía cada treinta segundos que, inmediatamente geoetiqueta y organiza de manera automática para que, pasado el tiempo, podamos recordar el restaurante donde cenamos aquella noche o el nombre de aquel río tan bonito por el que paseamos. Además, se conecta automáticamente con el ordenador, tablet o teléfono para poder visualizar o compartir las fotografías. Con este artilugio encima, no hay duda de que no se nos escapara ni un solo instante.